Detrás de cada gesto, cada plan, cada rutina, hay un objetivo común: el bienestar. Sentirte bien es una prioridad. Por eso, es importante hacer un pequeño esfuerzo para conseguir ese confort en tu día a día, tomando conciencia de cada paso que das, ayudando a tu cuerpo a reconectar con tu mente. Practicar ese momento en tu rutina facial es la oportunidad perfecta. Descubre algunos de nuestros secretos mejor guardados para sumar bienestar a tu día mientras cuidas tu piel.
Simplifica tu rutina
Es abrumadora toda la información que recibimos a diario sobre activos, productos faciales…¿Sabías que la rutina de skincare Coreana consta de 10 pasos? En The Great Fusion te invitamos a simplificar tu rutina, optando por productos altamente eficaces que te permitan ser constante y crear un hábito a largo plazo. ¿La clave? Disponer de tan solo 5 minutos por la mañana y por la noche y llevar a cabo el ritual de forma pausada y consciente.
Hazte con una muselina especial
¿Te secas la cara con la misma toalla con la que te secas las manos? Es vital utilizar una muselina que esté limpia y la utilices única y exclusivamente para tu rostro. Escoge una toalla, a poder ser, de algodón, suave y esponjosa. De este modo, elevarás la experiencia y convertirás tu ritual con The Great Cleanser en un momento de puro placer. Recuerda que debes secarte el rostro a toquecitos para evitar irritar tu piel.
Presta atención a la limpieza
Retirar la suciedad y células muertas de nuestra piel es el paso clave de nuestro ritual. Hacer este paso correctamente es muy sencillo, aunque el verdadero reto consiste en convertir ese momento en un gesto más profundo. Estimula todos tus sentidos y extiende The Great Cleanser en movimientos circulares, dando un suave masaje por todo el rostro, creando una suave espuma. Disfruta de su suave aroma y siente cómo elimina las impurezas de tu rostro envolviéndote en una experiencia única. Haz hincapié en la zona T, en los pliegues de la nariz, la barbilla y la zona de las cejas. Retira con agua tibia o bien con un pod de algodón reutilizable humedecido.
Y recuerda, haz que cada movimiento sea una caricia para tu alma. Una piel limpia es una piel saludable. Para que este paso sea eficaz, dedícale al menos un par de minutos.
El masaje es clave
El ritual de cuidado facial es tu momento de cuidado personal, de conectar cuerpo y mente y dedicar unos minutos a tu bienestar. Tómatelo con calma y recréate en cada paso. Aplica cada producto realizando suaves masajes, dedicándole tiempo a ese momento, facilitando la absorción de los activos. Puedes realizar este ejercicio con The Great Oil.
Añade algún utensilio extra
Para potenciar el efecto de los productos de tu ritual, complementa el masaje manual con un rollon o gua sha de jade tras aplicar The Great Serum. Descongestiona el rostro, favorece la absorción de activos y ofrece una experiencia realmente placentera al dedicar unos minutos a mejorarla apariencia de nuestra piel.
Estos son algunos de los gestos y rutinas que pueden ayudarte a convertir el cuidado facial en un ritual sencillo pero placentero y, sobre todo, eficaz. Recuerda cuidar esos momentos que te ayuden a sentirte mejor por dentro y por fuera.